Sentada sobre el frió tejado de una casa ajena recuerdo las vacías palabras que decías,
tus sonrisas perfectas cuando mi rostro veías y caricias causadas solo por deseo.
Hoy como una tonta como el plástico de las tejas donde me siento,
dejo caer unas cuantas lagrimas, y grito para mis adentro:¡ RENUNCIO! ¡RENUNCIO!
No mas espinas en mi corazón clavadas con una ternura fingida,
no mas palabras escritas con vino ni miradas traviesas se-mi-escondidas en humo...
¡RENUNCIO! ¡RENUNCIO!
No mas a estos sueños que hoy se tornan pesadillas,
que me atormentan al besar a mi amado
que en sus brazos me hace estremecer.
¡RENUNCIO!¡RENUNCIO!
A no tener un nuevo amanecer junto a ti....
El punto final y cíclico hoy se detiene en esta carta para volar,volar dentro de realidades en las que tu no estas y no estarás.
Hasta nunca.
para mí, sólo el impúdico suicidio.
ResponderEliminarelegí amarte, desearte y te disfruté mientras lo permitiste, me quedan los recuerdos hermosos que no me puedes arrebatar, no perdí nada ¿qué perdiste tú?
ResponderEliminarTe amo feliz cumpleaños Mordelona.
ResponderEliminar